A veces creemos que Jesús se equivoca.

Lucas 6:28-37

¿Qué mérito tienen ustedes al amar a quienes los aman?  ¿Y qué mérito tienen ustedes al hacer bien a quienes les hacen bien? Ustedes, por el contrario, amen a sus enemigos, háganles bien y denles prestado sin esperar nada a cambio.

¿Cómo voy amar a alguien que me hizo tanto daño?¿Cómo voy amar a alguien que me robó?¿Que me maltrató, que me humilló?

Personas que no nos hicieron el bien, cometieron injusticias con nosotros.

¿Cómo me pide el señor que ponga la otra mejilla? No es nada fácil...

Si alguien te pega en una mejilla, ofrécele también la otra; y si alguien te quita la capa, déjale que se lleve también tu camisa. A cualquiera que te pida algo, dáselo, y al que te quite lo que es tuyo, no se lo reclames.

Hagan ustedes con los demás como quieren que los demás hagan con ustedes.

Al ver el señor que esto era tan difícil, puso una gran recompensa a todo aquel que lo hiciera.

Y esa promesa es: perdonar nuestros pecados:

Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores.

Mateo 6:12

Como experiencia personal te cuento que no fue fácil cuando Dios me dijo que necesitaba amar a mis enemigos porque amar a los que me aman no tiene ningún mérito.

Y fue un proceso que lleve de la mano de Dios porque a veces tú corazón no te da para tanto, pero Jesús te regala parte de su corazón para que puedas AMAR A TUS ENEMIGOS.

Te aseguro que vendrá una paz y liviandad a tu vida cuando sueltes a esa persona.